EQEI
Respira: Bienestar emocional para médicos y equipos administrativos

En los centros de salud, el bienestar emocional no es solo una necesidad de los pacientes. También lo es de quienes sostienen la vida diaria de la institución: Médicos que cargan con decisiones críticas y equipos administrativos que enfrentan la presión constante de la organización, las citas y las demandas de los usuarios. Aunque sus funciones son diferentes, ambos colectivos comparten un mismo reto: gestionar emociones intensas en jornadas que rara vez dejan espacio para la pausa o la recuperación.
Un ejemplo basta para comprenderlo. Una médica sale de una consulta complicada, con la carga de haber transmitido un diagnóstico difícil, y sabe que en pocos minutos debe atender a la siguiente persona. Mientras tanto, en el área de admisión, una administrativa contiene la impaciencia de una sala llena de usuarios que esperan ser atendidos. La exigencia no está solo en lo técnico: lo que más desgasta es la tensión emocional que acompaña cada interacción. Y lo que define la diferencia entre agotamiento y equilibrio es la capacidad de gestionarla.
La Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo ha señalado que los riesgos psicosociales son uno de los principales desafíos en el sector sanitario y administrativo. Factores como la presión de tiempo, la sobrecarga de tareas y la exposición continua a la tensión interpersonal impactan directamente en el bienestar de los equipos y en la calidad del servicio que reciben los pacientes. Reconocer este hecho no es un gesto de debilidad, sino una oportunidad de fortalecer el sistema desde dentro.
El programa Respira nace precisamente para acompañar este proceso. No se trata de añadir más tareas a la jornada, sino de introducir recursos que permitan a médicos y administrativos respirar en medio de la presión, reconocer lo que sienten y responder con serenidad. Para los profesionales clínicos, supone aprender a cerrar una consulta difícil sin arrastrar la emoción al siguiente encuentro. Para los equipos administrativos, significa contar con herramientas para atender con empatía sin cargar con el malestar ajeno.
Cuando estas prácticas se integran en la vida diaria de un centro clínico, el cambio es evidente: los equipos trabajan con mayor claridad, las áreas colaboran con menos fricción y los pacientes reciben una atención más cercana y humana. El clima laboral deja de ser un espacio de tensión acumulada y se convierte en un entorno donde el cuidado es bidireccional: de los profesionales hacia los pacientes, y de la institución hacia quienes hacen posible su funcionamiento.
EQEI Vital es, en este sentido, un compromiso con la dignidad emocional de quienes sostienen el sistema sanitario desde la consulta y desde el mostrador. Porque cuidar de ellos es cuidar, al mismo tiempo, de la salud y la esperanza de toda la comunidad.